Revista Bolsa

Alternativas de financiación a tu medida

Por Cris_md

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Desde que ha comenzado la crisis, la tasa de ahorro de las familias en España ha ido reduciéndose a pasos agigantados, debido a la tormenta perfecta que se ha formado en nuestro país: más impuestos, cesta de la compra más cara, reducciones de sueldo o incluso pérdida de nuestro trabajo y agotamiento de la prestación de desempleo.

Lo que ha provocado que las familias necesiten más fuentes de financiación para afrontar imprevistos incluso en ocasiones para llegar a final de mes.

¿Cómo podemos enfrentarnos a esto?

El hecho es que muchos hogares se han visto obligados a recurrir al fondo de emergencias que poseían para sobrevivir en el día a día, con lo cual ante cualquier imprevisto que trastoque éste y suponga un desembolso mayor de lo planificado, los problemas en el hogar y las tensiones en el bolsillo aparecerán. Si se llega a este punto, ¿a qué o quién puedes acudir?

Cuando se trate de cantidades de dinero elevadas, las medidas que habremos de tomar serán drásticas y alterarán completamente la economía familiar, por lo que cualquier decisión es mejor que no hacer nada.

Pero cuando son cantidades más modestas, la solución más común para los españoles es irnos al banco a pedir alguna solución, ¿Una ampliación de la hipoteca?, ¿Un préstamo al consumo?. Aunque tal como están los bancos, incluso esto es difícil en ocasiones.

Sin embargo, hay mundo más allá de nuestro banco. Existen varias alternativas donde nos podemos encontrar grandes diferencias en los intereses que nos cobrarán o en los plazos. Por eso, hay que ser muy cuidadosos a la hora de elegir nuestra solución.

A continuación vamos a ver algunos de los productos financieros que se suelen usar como alternativas para solicitar dinero para imprevistos.

Cómo afrontar un imprevisto

Tarjetas de crédito

Lo más normal es que como forma de protegerse ante gastos imprevistos las familias españolas usen el importe de crédito de una tarjeta. Estas tienen sus peligros ya que un uso descontrolado de la tarjeta puede obligar a devoluciones de dinero más intereses que sean como una bola de nieve y cada vez vayan creciendo más. Sin embargo, en caso de imprevisto, se puede considerar como una buena solución.

El interés de las tarjetas de crédito suele rondar entre el 18% y 24%. Es un producto más caro que otras alternativas financieras pero es de uso inmediato sin necesidad de solicitar nada al banco, ni papeleos ni firmas de ningún tipo. Se dispone del límite de crédito de forma inmediata y luego se devolverá mes a mes. Es algo más caro que otros productos pero se paga la inmediatez.

Si no somos usuarios de tarjetas, o consideramos que es más caro que otras alternativas, ya nos queda solamente entrar en contacto con nuestra entidad financiera o con otra y plantearles nuestro problema.

Anticipos de nómina

El mejor consejo que os podemos dar es que acudáis a la entidad donde tenéis domiciliada la nómina. Primero, porque casi con total seguridad vuestra cuenta nómina permite solicitar un anticipo de la misma sin pago de intereses hasta un determinado importe que, en caso de que llegue para cubrir el imprevisto, seguro que es la solución más barata.

El problema radica cuando el importe a pagar es mayor que el que nos ofrece el anticipo de nómina. Ahí la oferta de productos a contratar para conseguir el dinero que necesitamos se amplía.

Crédito Preconcedido

Con mucha probabilidad nuestra entidad, que ya nos conoce, tenga lo que se denomina como un crédito preconcedido, es decir, basándose en lo que conocen de nosotros y en el dinero que ganemos, nos permitirán obtener un préstamo de forma muy sencilla; normalmente, solo con el DNI basta.

Mini créditos y préstamos rápidos

Si aún así necesitamos más dinero, la cosa ya se complica y empieza a aparecer la necesidad de tener que presentar papeles para pedir una operación que nos aporte el dinero solicitado.

Préstamos personales (con diferentes requisitos de riesgos, con o sin avalistas, etc), mini créditos o los denominados préstamos rápidos, son diferentes alternativas que en función de nuestro historial como cliente e importes a solicitar y destino de los mismos, entran a ser las alternativas que nos quedan para conseguir ese dinero que nos permita afrontar un imprevisto.

Los mini créditos son préstamos de poca cantidad, un máximo de 600 euros en la mayoría de los casos, y con plazos de amortización muy breves, entre 15 y 45 días.

Hay que tener en cuenta que los intereses que se aplican sobre este tipo de préstamos son muy elevados, incluso un 45% del importe prestado, así que una tarjeta de crédito puede ser mejor que estas alternativas.

Conclusión

Está claro que no tener un buen fondo de imprevistos sale MUY caro. Pero cuando la necesidad aprieta y no puedes acudir a amigos o familiares, nuestra recomendación es esta: Mira y analiza todas tus alternativas. Así, dependiendo de lo que necesites, podrás siempre elegir la opción “menos mala” y ahorrarás dinero.

Sobre el autor
Alternativas de financiación a tu medida

Antonio Martin Morin

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Antonio Martín Morín es especialista en finanzas personales. Su objetivo es ayudar a las personas a gestionar mejor su dinero para que de esta forma tengan una mayor calidad de vida


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